MACH es la primera tarjeta de prepago de la banca chilena, emitida por el banco Bci y este año cuenta con casi 4 millones de usuarios.
La era de la digitalización ha impulsado el desarrollo de distintos servicios financieros en Chile, los cuales permiten a las personas utilizar su dinero de manera más versátil. Una de las soluciones monetarias más populares en la actualidad son las tarjetas prepago, entre las cuales se destaca MACH.
Las tarjetas de prepago permiten a las personas acceder a productos y servicios que antes solo se podían pagar con tarjetas de crédito. En el caso de MACH, las personas actualmente pueden hacer compras en más de 30.000 comercios nacionales e internacionales, pagar servicios de streaming, realizar pagos automáticos y transferir a usuarios de todos los bancos con esta plataforma.
El valor estratégico de MACH
MACH nació el 2018 en el área de Innovación de Bci bajo la idea de que todas las personas, chilenas y extranjeras, pudieran acceder fácilmente a productos y servicios financieros de calidad como compras internacionales y el acceso a servicios de streaming y de transporte.
Actualmente, MACH cuenta con casi 4 millones de usuarios y ofrece distintas funcionalidades y productos como su tarjeta virtual, pensada especialmente para contratar servicios online y una tarjeta física que permite pagar de manera simple en miles de comercios. MACH también permite hacer transferencias a otros bancos, generar ahorro con intereses y pagar servicios y cuentas fácilmente a través de la aplicación.
“Desde MACH siempre estamos buscando nuevas formas de hacer la vida más simple a nuestros usuarios y trabajamos para otorgarle a nuestra comunidad más funcionalidades que permitan hacer de la cuenta digital de Bci, su cuenta principal”, indica la organización.
La importancia de los distintos medios de pago en Chile
Según datos de MACH, la apertura de los medios de pagos en Chile ha sido muy importante, tanto en la experiencia del usuario, como en la diversidad de estos. Por ejemplo, hoy existen múltiples billeteras digitales con su propio sistema, botones de pago en efectivo en ecommerce, entre otros. Y esto ha democratizado el acceso a los medios de pago y les ha dado alternativas a las personas, para que elijan la que más se ajuste a sus necesidades.
Adicionalmente, la existencia de distintos métodos de pago fomenta la competencia, lo que contribuye al desarrollo de soluciones y servicios más innovadores y de calidad, lo que repercute en una mayor inclusión financiera, entre otras cosas.
Finalmente, también ayuda al desarrollo económico, ya que puede contribuir a estimular el nacimiento de nuevos negocios y la innovación en la industria financiera.
Oportunidades dentro de la Industria Financiera
Existen oportunidades en distintos niveles, un claro ejemplo es la digitalización, que ha sido un factor relevante para el éxito de MACH y que se vio especialmente acelerada por la pandemia del Covid-19.
También se presentan oportunidades a través de la inclusión financiera. De acuerdo a datos brindados por MACH, en la región, hay una gran cantidad de personas que no tienen acceso a servicios financieros básicos, y la banca digital puede ser una solución, con productos y servicios completamente digitales pensado en un público más amplio.
“Ya son más de 300 mil usuarios extranjeros que nos prefieren posicionándonos como una solución que les permite a los usuarios bancarizarse rápidamente y acceder, por ejemplo, al pago de cuentas de servicios básicos, recarga de servicios prepago y de tarjeta Bip, retirar dinero de cajeros automáticos y tener un medio de pago Visa para sus distintas necesidades financieras”, asegura la organización.
Influencia de la Ley Fintech en el país
La promulgación de la Ley Fintech representa una oportunidad para todo el sistema financiero. Tras su promulgación se espera que se inicie un proceso regulatorio que habilite un escenario donde los bancos puedan complementar sus ofertas de productos y servicios junto a las capacidades de innovación que prestan actualmente este tipo de empresas. Todo esto, dentro de un marco regulatorio que entrega mayor confianza y seguridad a los clientes y al sistema en general.
MACH asegura que la Ley Fintech es una respuesta regulatoria a múltiples dolores de clientes, comercios y de la industria en general. “Al otorgar claridad sobre los estándares de seguridad, consentimiento y competencia, la Ley es un paso hacia adelante para continuar el trabajo conjunto de distintos actores del ecosistema para entregar productos y servicios que apoyen la inclusión financiera de nuestros clientes”, explican.
Los principios establecidos en la Ley Fintech sobre promoción de la competencia y la inclusión financiera aseguran que el proceso de implementación habilitará la entrada de nuevos competidores. El mandato de la Ley a la Comisión para el Mercado Financiero es claro respecto a la necesidad de incentivar la innovación como un motor de competencia y mejora de la experiencia de los clientes. “Por esta razón, MACH participará activamente en colaborar con el proceso, a la vez que continuaremos avanzando en nuestras iniciativas para aprovechar las oportunidades que esta Ley representa. Todo esto, con el fin de entregar productos y servicios que marquen una diferencia en la vida de nuestros clientes”, enfatizan.
Esta Ley genera oportunidades, especialmente en la implementación del Sistema de Finanzas Abiertas. La posibilidad de que los clientes puedan compartir sus datos de manera segura entre los distintos oferentes del mercado promete mayor competencia por la preferencia de los clientes. Y también incentiva a que la industria desarrolle las capacidades para permitir mayor competencia y una mejora en las funcionalidades que actualmente están disponibles para ellos. “En MACH estamos al tanto de estas oportunidades y continuaremos trabajando en cómo poder implementar iniciativas y poner nuevas funcionalidades a disposición de nuestros clientes, aprovechando las nuevas capacidades que contiene la Ley Fintech”, finalizan.
